Especialisatas del Instituto Salk en la Jolla, Estados Unidos, encontraron un vínculo entre el sistema inmunológico y el crecimiento capilar. El artículo, publicado en Nature Immunology, detalla cómo las células inmunes interactúan con las células de la piel utilizando una hormona para generar nuevos folículos pilosos para estimular el crecimiento del cabello.
Además, el documento señala que este objetivo molecular inesperado reveló que una afección en el sistema inmunológico a una persona, también afecta su crecimiento capilar. Un factor el cual podría ser la causa de la pérdida del cabello, un problema capaz de afectar al 63% de los hombres a nivel mundial, según cifras del sitio Svenson.
De acuerdo con los propios investigadores del Instituto Salk, los científicos no comenzaron a estudiar el crecimiento capilar. De hecho, estaban interesados en investigar el papel de las células T y las hormonas glucocorticoides en las enfermedades del sistema inmunológico. Sin embargo, en su primer estudio para saber el funcionamiento de estos componentes inmunes en la esclerosis múltiple encontraron que desempeñaban un papel importante en la pérdida del cabello.
“Los hallazgos sugirieron que algún tipo de relación debía estar ocurriendo entre las células T reguladoras y las células madre del folículo piloso para permitir la regeneración del cabello“. Afirmó Ye Zheng, profesor asociado del Centro de Inmunobiología y Patogénesis microbiana de Salk, quien también agregó que tales organismos T suelen ser la primer señal de advertencia en múltiples enfermedades.
Para lograr el descubrimiento, los especialistas utilizaron diversas técnicas para monitorear la comunicación multicelular entre las células T y los receptores de glucocorticoides en muestras de tejido de la piel. Por ejemplo, emplearon métodos de diafonía y un estudio para descifrar la comunicación entre dos circuitos.
Tras ello, los científicos encontraron un mecanismo por donde los receptores de glucocorticoides inducen la protección de la proteína denominada TGT-beta3. Esta proteína tiene el poder de activar las células madre del folículo para estimular el crecimiento capilar.
A través de un análisis adicional, los expertos confirmaron cómo está vía esa independiente para mantener el equilibrio inmunológico regulado por las células T. Aunado a ello, el estudio también reveló que estos organismos reguladores y las hormonas glucocorticoides, no son inmunosupresores, sino que estimulan el crecimiento capilar.
Si bien, los científicos del Instituto Salk argumentaron que este es un importante descubrimiento para estimular el crecimiento capilar, todavía faltan estudios para confirmar el hallazgo. De tener resultados positivos, los expertos podrían llevar este descubrimiento relacionado con el sistema inmunológico a un nivel de experimentación en personas.